Alice Wattelet.

La fuerza de un paisaje a veces impone una arquitectura poderosa, que se apodera del lugar y permite el viaje del visitante. Entre el polimorfismo y la pictorialidad, Georges Adilon moldea la imagen arquitectónica y el entorno educativo de la institución Sainte-Marie de Lyon. Trabajando la arquitectura como una pintura de Adilon crea para los estudiantes un ambiente diferente.

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« En mi padre, la arquitectura y la pintura se alimentaban mutuamente », Marie Adilon

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Siguiendo sus pasos, nos inspiramos de L’Œuvre au Noir, del artista para simbolizar la fuerza y ​​el poder del sitio a través de un modelo sensible, completamente metálico.

Así, buscando poesía y armonía, exploramos el mundo del niño. De acuerdo con la escuela de Sainte-Marie, imaginamos una escuela jardín de infancia - primario que permite al niño el movimiento del cuerpo y la mente. En la continuidad de Adilon, la pintura interviene en el diseño. Desde un punto de vista espiritual y formal, nos inspiramos en Courbe Dominante de Vassily Kandinsky, que permite la creación de una arquitectura en constante movimiento. La simbolización de la elevación impone aquí la elaboración de una jerarquía de arquitectura en forma de celdas, tanto en altura como en conjuntos de topografías. El simbolismo de la pintura ocupa un lugar central en el diseño y permite el desarrollo de la arquitectura, una arquitectura activa.